La 14ª Conferencia de la ONU sobre el Clima en Poznan, Polonia, comenzó hoy, con la advertencia a la comunidad internacional de que dispone de un año para alcanzar un acuerdo con el fin de salvar al planeta de un desenlace fatal.
Para ello será necesario concluir, a fines de 2009 en Copenhague, un acuerdo global ambicioso para controlar el cambio climático, a pesar de las dificultades adicionales provocadas por la crisis financiera, seg´çun quedó consignado en las intervenciones del primer día en Poznan.
"La Humanidad, por sus comportamientos ya empujó al sistema del planeta Tierra hasta sus límites", dijo el ministro polaco del Medio Ambiente Maciej Nowicki, presidente de los trabajos y anfitrión de la reunión, ante unos 9.000 delegados enviados por 185 países a la reunión que finaliza el 12 de diciembre.
"Continuar de esta forma provocaría amenazas de una intensidad jamás vista: enormes sequías e inundaciones, ciclones devastadores, pandemias de enfermedades tropicales (...) e incluso conflictos armados y migraciones sin precedentes", advirtió Nowicki.
El ministro polaco pidió a los negociadores que "no cedan a oscuros intereses particulares (cuando) debamos modificar la peligrosa dirección que tomó la Humanidad".
El presidente del Grupo de Expertos sobre la Evolución del Clima (GIEC), el Premio Nobel de la Paz 2007 Rajendra Pachauri, también subrayó el grave impacto de permanecer intactivos y recordó que unos 4.300 millones de personas, que llegarían a 6.900 en unos años, viven en las grandes cuencas fluviales y corren el riesgo de verse afectadas por las sequías.
Es "casi la mayoría de la Humanidad", insistió.
En diciembre de 2007, la conferencia de Bali acordó "una hoja de ruta" destinada a conducir a los 192 Estados signatarios de la Convención de la ONU sobre los cambios climáticos (CNNUCC) a acordar, a fines de 2009, nuevos compromisos contra el efecto invernadero.
Estos compromisos deben ser fortalecidos y ampliados para incluir a Estados Unidos y las grandes economías emergentes, como China, que se ha convertido en el principal país contaminador del mundo.
Hasta ahora sólo 37 países industrializados (todos, excepto Estados Unidos) están sometidos a la obligación de reducir sus emisiones contaminantes en el periodo 2008-2012.
"El trabajo que nos espera es, a la vez, difícil y crítico: pero en cada dificultad surgen oportunidades, si ustedes saben concentrarse más en lo que les une que en lo que les divide", recordó el secretario ejecutivo de la Convención de la ONU sobre los Cambios Climáticos (CNUCC), Yvo De Boer.
"Tienen ante ustedes un año hasta llegar a Copenhague. El reloj avanza. Hay que pasar a la velocidad superior", agregó, reconociendo sin embargo que la crisis financiera complicará la tarea.
"Movilizar los recursos financieros a la escala requerida constituirá un verdadero desafío", dijo De Boer.
"Nosotros no podemos permitirnos desacelerar el ritmo", afirmó Brice Lalonde, embajador para el clima de Francia, cuyo país preside la Unión Europea hasta fines de año.
No obstante, Poznan es "un momento complicado" de la negociación, consideró Lalonde, al referirse a la difícil conclusión del Plan Climático europeo (-20% de gases de efecto invernadero en 2020) que divide a los Estados miembros, y la transición gubernamental en Estados Unidos.
"Digamos que aquí nos falta un importante equipo de negociadores", sostuvo Lalonde, en referencia al gobierno de Barack Obama que debe asumir en enero en Estados Unidos, y considerado más receptivo a las preocupaciones sobre el cambio climático.
Un delegado estadounidense, empero, recordó que existe "un largo consenso en cuestiones internacionales" con Obama, aunque no descartó que "el próximo equipo pueda recoger la pelota y relanzarla".
AFP
No hay comentarios:
Publicar un comentario