09 junio 2010

Obama busca "a quién debe patear el culo" por derrame

El presidente Barak Obama dijo que quisiera saber "a quién debe patear el culo" por el derrame de crudo en el Golfo de México, convertido en la peor catástrofe ambiental en Estados Unidos, al rechazar críticas de que su gobierno no hacía lo suficiente para frenarlo.
"Voy a ser claro en esto por que veo que es una idea que se ha metido en la cabeza de la gente y los medios de comunicación la promueven", dijo Obama en la cadena de televisión NBC, al responder a las críticas que podrían ensombrecer la popularidad de su gobierno.
"Estuve allí el mes pasado, antes que la mayoría de estos críticos siquiera prestaran atención a lo que ocurría en el Golfo", dijo.
Obama destacó que había pasado un tiempo hablando con los pescadores y los expertos encargados de la limpieza de la gigantesca mancha de petróleo en la costa del sudeste de Estados Unidos para saber "qué culos debo patear".
DESPEDIDO. Además, Obama dijo que de haber estado en sus manos, hubiera despedido al titular de Britush Petroleum (BP), Tony Hayward, por sus comentarios minimizando el masivo derrame de crudo en el Golfo de México.
"El no estaría trabajando para mi después de esas declaraciones", a NBC.
Hayward fue ampliamente criticado por sus recientes quejas por la enorme cantidad de tiempo que ha dedicado a enfrentar el derrame, convertido en la peor catástrofe medioambiental en Estados Unidos, y por minimizar el impacto de la fuga, a la que describió al comienzo como "muy, muy modesta". El director de BP se disculpó luego por esas declaraciones.
AFP

04 junio 2010

British Petroleum: empiezan a rescatar a los animales afectados por el derrame

La tragedia ecológica causada por BP debilitó el ecosistema de la zona y ya amenaza a miles de aves, tortugas y atún rojo, este último propio de la zona. Aseguran que las consecuencias pueden durar décadas

La petrolera BP tiene un nuevo problema que no refiere solamente a cómo detener la fuga de petróleo en el Golfo de México, comentó el secretario del Interior Ken Salazar, mientras organizaciones medioambientales se preparaban para tratar a animales marinos.

A más de 45 días del derrame, el Centro para el Cuidado de la Fauna y Flora Contaminados por Derrames de la Universidad de California ya coordina desde hace semanas con el gobierno de los EEUU y unas 200 organizaciones medioambientales, entrar en acción para rescatar animales afectados.

Un total de 154 tortugas marinas, sobre todo de la especie Kemp, está en peligro, así como 12 delfines y 23 aves migratorias, según explicaron funcionarios de la Agencia Nacional Oceánica y Atmosférica (Noaa) y de la Agencia de Pesca y Vida Salvaje en conferencia telefónica.

La zona es hábitat de animales amenazados como las especies de tortugas marinas Kemp Ridley, Hawksbill, Loggerhead y Leatherback, y el cotizado atún rojo, cuya población ha caído en más de 80% debido a la sobrepesca.

El derrame, que comenzó el 20 de abril tras la explosión de una plataforma petrolífera, amenaza también a una multitud de aves marinas como los pelícanos marrones y a los alrededor de dos mil kilómetros cuadrados de manglares de Louisiana, Texas y el sur de Florida, críticos para el equilibrio del frágil ecosistema de la zona.

Barbara Schroeder, funcionaria de Noaa, explicó que las necropsias, el equivalente a las autopsias humanas, no han detectado restos de petróleo en las tortugas marinas, aunque aun así, su muerte podría estar relacionada con la ingestión de químicos dispersantes para fraccionar el crudo en partículas pequeñas e impedir que flote en la superficie, que se han aplicado de forma masiva desde el inicio del derrame.

El director en funciones de la Agencia de Pesca y Vida Salvaje, Rowan Gould, afirmó hoy que las consecuencias del derrame podrían durar décadas.


Los datos oficiales indican que cada día se vierten unos 800.000 litros de petróleo al mar, aunque científicos independientes estiman que la cifra podría ser hasta diez veces mayor.

01 junio 2010

Centroamérica cifra en al menos 135 los muertos dejados por 'Agatha

Guatemala, El Salvador y Honduras cuentan los muertos dejados por la tormenta tropical 'Agatha' el fin de semana a su paso, mientras las cifras parciales sitúan el número de muertes en 135 personas y en miles el de damnificados.
El último informe de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) de Guatemala se fijó en 109 los fallecidos, y en 54 los desaparecidos en todo el país, sin embargo, los cuerpos de socorro aseguran que ya son 120 las víctimas mortales.
Un pueblo de Guatemala tras el paso de 'Agatha'. | Reuters
Bomberos, autoridades locales y vecinos continúan buscando cadáveres entre los escombros de las casas derrumbadas, así como en los aludes de tierra y lodo que provocó el fenómeno atmosférico.
Las cifras de víctimas, según advirtieron tanto la Conred como los cuerpos de socorro, podrían incrementarse en las últimas horas, debido a que continúan los trabajos de rescate en todo el país.
El informe de Conred señala que 112.000 personas han sido evacuadas desde el sábado, 37.000 de ellas a albergues temporales; 25.000 se encuentran en riesgo, y más de 40.000 fueron damnificadas (sufrieron algún daño personal o material).
Las decenas de derrumbes que cubren las carreteras y los más de 20 puentes que han colapsado debido al crecimiento del nivel de las aguas de los ríos, impide a las autoridades de Protección Civil llegar con prontitud a los lugares afectados más apartados.
Por la vía área, con el apoyo de helicópteros privados y del Ejército, la Conred ha enviado ayuda a estos enclaves, situados en la costa sur, el altiplano y el centro del país, donde, según noticias de medios locales, los pobladores con sus propios medios realizan los trabajos de desescombro.
Las súplicas de ayuda, que a través de la vía telefónica hacen los damnificados en las radios locales, no cesan, y las autoridades, aunque aseguran que "todo está bajo control", no dan a basto para atender todos los llamamientos.
Aunque las lluvias empezaron a ceder desde la tarde del domingo, varios ríos de la costa sur continúan desbordados y una incalculable cantidad de viviendas anegadas por el agua.
Los servicios de agua potable y energía eléctrica aún no están establecidos totalmente en varias comunidades, y los alimentos y combustibles empiezan a escasear.

El Salvador

En El Salvador, las lluvias asociadas al ciclón tropical "Agatha" obligaron a evacuar a 10.335 personas y han causado un "impacto generalizado" en el país, que tiene un 95 por ciento de las carreteras afectadas, mientras Protección Civil mantiene la cifra en nueve muertos y dos desaparecidos.
"Se mantiene el dato de nueve personas fallecidas, dos desaparecidas y tres heridas, y las evacuadas son 10.335", declaró el director de Protección Civil, Jorge Meléndez, en el último balance de la situación.
También se registran un centenar de viviendas afectadas y la interrupción total del tráfico en rutas de circulación importantes, entre ellas, una de las que conduce a Guatemala a través del Puente Arce, que comunica a ambos países en el departamento occidental de Ahuachapán y "está cuarteado".
"La situación de impacto es bastante generalizada y eso nos lleva a determinar la necesidad del uso de los recursos del Gobierno de manera expedita", aseguró Meléndez, quien señaló que se mantiene la "emergencia nacional" y la alerta roja decretada el domingo por el presidente Mauricio Funes.

Honduras

En Honduras el número de muertos por las lluvias se elevó este lunes a 17, según el último informe dado a conocer por la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).
Además, una persona se da por desaparecida y otras cuatro lesionadas; 3.227 han sido evacuadas, 235 damnificadas y 3.168 albergadas; 3.560 fueron afectadas directamente por las lluvias, que además dañaron 675 viviendas, mientras que 63 resultaron completamente destruidas.
La Copeco también registra daños en 27 vías de comunicación entre carreteras principales y caminos de acceso, puentes, escuelas y edificios públicos.
El presidente hondureño, Porfirio Lobo, visitó este lunes en Tegucigalpa varios de los lugares altamente vulnerables de la ciudad que fueron afectados ayer por el desbordamiento del río Choluteca.
Aunque las lluvias han cesado casi por completo en la región debido a que la tormenta tropical en que se convirtió "Agatha" ya ha desaparecido, los restos del ciclón aún podrían causar lluvias en las próximas horas.