13 abril 2009

Que es el Cambio Climatico ???


El cambio climático es una realidad. Existe un amplísimo consenso entre los científicos en que la causa de todo ello son las emisiones de gases de efecto invernadero producidas por la actividad humana. Estas emisiones y su constante aumento son responsables de un aumento de las temperaturas, aumento que seguirá produciéndose en las próximas décadas, hasta alcanzar niveles de entre +1,4° C y +5,8° C en todo el planeta de aquí a 2100 con respecto a las temperaturas de 1990.”

Grupo Intergubernamental de Expertos de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.


La temperatura media de la superficie terrestre ha subido más de 0,6ºC desde los últimos años del siglo XIX. Se prevé que aumente de nuevo entre 1,4ºC y 5,8ºC para el año 2100, lo que representa un cambio rápido y profundo. Aun cuando el aumento real sea el mínimo previsto, será mayor que en cualquier siglo de los últimos 10.000 años.

La razón principal de la subida de la temperatura provienen de la actividad humana: el proceso de industrialización iniciado hace siglo y medio y, en particular, la combustión de cantidades cada vez mayores de petróleo, gasolina y carbón, la tala de bosques y algunos métodos de explotación agrícola.

Estas actividades han aumentado el volumen de "gases de efecto invernadero" en la atmósfera, sobre todo de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso. Estos gases se producen naturalmente y son fundamentales para la vida en la Tierra; impiden que parte del calor solar regrese al espacio, y sin ellos el mundo sería un lugar frío e inhabitable. Pero cuando el volumen de estos gases es considerable y crece sin parar, provocan unas temperaturas artificialmente elevadas y modifican el clima. El decenio de 1990 parece haber sido el más cálido del último milenio, y 1998 el año más caluroso. Las temperaturas y fenómenos atmosféricos extremos se suceden, tal como vemos.

El cambio climático puede tener consecuencias nefastas: nos lo podrían confirmar los dinosaurios, si no se hubieran extinguido. La teoría dominante es que no sobrevivieron cuando un meteorito gigante se estrelló contra la Tierra hace 65 millones de años, levantando tal cantidad de polvo en la atmósfera que la luz solar se vio fuertemente reducida, las temperaturas bajaron precipitadamente, muchas plantas no pudieron crecer y la cadena alimentaria se desintegró.

Lo que ocurrió a los dinosaurios es un claro ejemplo de cambio climático más rápido que el que el ser humano está ahora infligiéndose a sí mismo... pero no el único. Las investigaciones sobre los núcleos de hielo y los sedimentos en los lagos revelan que el sistema climático ha sufrido otras fluctuaciones abruptas en el pasado lejano: parece que el clima ha tenido "puntos de inflexión" capaces de generar fuertes sacudidas y recuperaciones. Aunque los científicos están todavía analizando lo que ocurrió durante esos acontecimientos del pasado, es claro que un mundo sobrecargado con 6.300 millones de personas es un lugar arriesgado para realizar experimentos incontrolados con el clima.



Según las previsiones, la actual tendencia hacia el calentamiento provocará numerosas extinciones. Muchas especies vegetales y animales, debilitadas ya por la contaminación y la pérdida de hábitat, no sobrevivirán los próximos 100 años. El ser humano, aunque no se ve amenazado de esta manera, se encontrará probablemente con dificultades cada vez mayores. Los graves episodios recientes de tormentas, inundaciones y sequías, por ejemplo, parecen demostrar que los modelos informáticos que predicen "episodios climáticos extremos" más frecuentes están en lo cierto.

El nivel del mar subió por término medio entre 10 y 20 centímetros durante el siglo XX, y para el año 2100 se prevé una subida adicional de 9 a 88 cm (la subida de las temperaturas hace que el volumen del océano se expanda, y la fusión de los glaciares y casquetes polares aumenta el volumen de agua). Si se llega al extremo superior de esa escala, el mar podría invadir los litorales fuertemente poblados de países como Bangladesh, provocar la desaparición total de algunas naciones (como el Estado insular de las Maldivas), contaminar las reservas de agua dulce de miles de millones de personas y provocar migraciones en masa.

Según las previsiones, los rendimientos agrícolas disminuirán en la mayor parte de las regiones tropicales y subtropicales, pero también en las zonas templadas si la subida de la temperatura es de más de unos grados. Se prevé también un proceso de desertificación de zonas continentales interiores, por ejemplo el Asia central, el Sahel africano y las Grandes Llanuras de los Estados Unidos. Se prevé que España será el país europeo más afectado por la desertización, que podrá alcanzar el 30% en menos de una década.

Estos cambios podrían provocar, como mínimo, cambios y pérdidas significativas en el aprovechamiento de la tierra y el suministro de alimentos. La zona de distribución de enfermedades como el paludismo podría ampliarse.

El calentamiento atmosférico es un problema "moderno": es complicado, afecta a todo el mundo y se entremezcla con cuestiones difíciles como la pobreza, el desarrollo económico y el crecimiento demográfico. No será fácil resolverlo. Ignorarlo, sería todavía peor. Nos afecta a todos/as y es nuestra responsabilidad frenarlo.



Hace más de un decenio, la mayor parte de los países se adhirieron a un tratado internacional –la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático– para comenzar a considerar qué se puede hacer para reducir el calentamiento atmosférico y adoptar medidas para hacer frente a las subidas de la temperatura que sean inevitables.

El 1997, los gobiernos acordaron incorporar una adición al tratado, conocida con el nombre de Protocolo de Kyoto, que cuenta con medidas más enérgicas (y jurídicamente vinculantes) y que entró en vigor en 2005. Desde 1988, un Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático ha examinado las investigaciones científicas y ofrecido a los gobiernos resúmenes y asesoramiento sobre los problemas climáticos.


El Protocolo de Kioto es el instrumento más importante destinado a luchar contra el cambio climático. Contiene el compromiso asumido por la mayoría de los países industrializados de reducir sus emisiones de algunos gases de efecto invernadero, responsables del recalentamiento del planeta, en una media de un 5 %, dentro del periodo que va desde el año 2008 al 2012, en comparación a las emisiones al año 1990.

Por ejemplo, si la contaminación de estos gases en el año 1990 alcanzaba el 100%, al término del año 2012 deberá ser del 95%.
Esto no significa que cada país deba reducir sus emisiones de gases regulados en un 5%, sino que este es un porcentaje a nivel global y, por ejemplo, España puede incrementar sus emisiones en un 15%, debido a su posición de partida, muy diferente a los de otros países de su entorno.

Actualmente se encuentran en debate las bases para un nuevo Protocolo postKioto para después de 2012.

06 abril 2009

El Empire State también quiere ser 'verde'

El rascacielos más emblemático de Nueva York se tiñe de verde. Los propietarios del emblemático Empire State, que cumple ya 77 años, han anunciado un innovador programa de reformas dotado con 500 millones de dólares (unos 375 millones de euros) para reducir el 38% de su consumo energético y sumarse así a la lucha contra el cambio climático.

Así lo explicaron este lunes el alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg, y el ex presidente estadounidense Bill Clinton. Este último explicó que la iniciativa forma parte del programa que lleva su nombre, que se desarrolla en 40 de las mayores ciudades del mundo, a favor del medio ambiente. "Con estos innovadores proyectos, además de proteger al planeta, se reactiva la economía", señaló Clinton.

El rascacielos más famoso de Nueva York se suma a la lucha contra el cambio climático con un innovador programa de remodelación apadrinado por Bill Clinton para reducir su consumo energético

AGENCIAS - Nueva York - 07/04/2009

El representante de la empresa propietaria del Empire, Anthony Malkin, añadió por su parte que una de las claves para reducir las emisiones contaminantes en grandes ciudades como Nueva York, donde la aportación de los edificios comerciales y residenciales llega hasta el 70%, está no sólo en intentar que los nuevos edificios sean respetuosos con el medio ambiente, sino en "reducir los costes energéticos de los que ya están construidos".

La remodelación del edificio, que tiene 102 pisos y se construyó en 1931, afecta a sus sistemas eléctrico y de ventilación. Además, desde 2008 se desarrolla un escupuloso protocolo de reciclaje y se utilizan materiales de limpieza y de control de plagas ecológicos. Los cálculos realizados por los propietarios cifran en 4,4 millones de dólares el ahorro anual en energía.

En la puesta en marcha del programa, que espera convertirse en modelo para otros edificios, participan la Iniciativa Clinton sobre el Cambio Climático, otras organizaciones como el Rocky Mountain Institute y empresas como Johnson Controls y Jones Lang LaSalle.

30 marzo 2009

Transgénicos

Un transgénico (Organismo Modificado Genéticamente, OMG) es un organismo vivo que ha sido creado artificialmente manipulando sus genes. Las técnicas de ingeniería genética consisten en aislar segmentos del ADN (el material genético) de un ser vivo (virus, bacteria, vegetal, animal e incluso humano) para introducirlos en el material hereditario de otro.

Por ejemplo, el maíz transgénico que se cultiva en España lleva genes de bacteria que le permiten producir una sustancia insecticida.

La diferencia fundamental con las técnicas tradicionales de mejora genética es que permiten franquear las barreras entre especies para crear seres vivos que no existían en la naturaleza. Se trata de un experimento a gran escala basado en un modelo científico que está en entredicho.

Algunos de los peligros de estos cultivos para el medio ambiente y la agricultura son el incremento del uso de tóxicos en la agricultura, la contaminación genética, la contaminación del suelo, la pérdida de biodiversidad, el desarrollo de resistencias en insectos y "malas hierbas" o los efectos no deseados en otros organismos. Los efectos sobre los ecosistemas son irreversibles e imprevisibles.


Los riesgos sanitarios a largo plazo de los OMG presentes en nuestra alimentación o en la de los animales cuyos productos consumimos no se están evaluando correctamente y su alcance sigue siendo desconocido. Nuevas alergias, aparición de nuevos tóxicos y efectos inesperados son algunos de los riesgos.

Los OMG refuerzan el control de la alimentación mundial por parte de unas pocas empresas multinacionales. Los países que han adoptado masivamente el uso de cultivos transgénicos son claros ejemplos de una agricultura no sostenible. En Argentina, por ejemplo, la entrada masiva de soja transgénica exacerbó la crisis de la agricultura con un alarmante incremento de la destrucción de sus bosques primarios, el desplazamiento de campesinos y trabajadores rurales, un aumento del uso de herbicidas y una grave sustitución de la producción de alimentos para consumo local.

La solución al hambre y la desnutrición pasa por el desarrollo de tecnologías sostenibles y justas, el acceso a los alimentos y el empleo de técnicas como la agricultura y la ganadería ecológicas. La industria de los transgénicos utiliza su poder comercial e influencia política para desviar los recursos financieros que requieren las verdaderas soluciones.


Defendemos la aplicación del Principio de Precaución y nos oponemos por lo tanto a cualquier liberación de OMG al medio ambiente. Los ensayos en campo, incluso a pequeña escala, presentan igualmente riesgos de contaminación genética, por lo que también deben prohibirse.

Greenpeace no se opone a la biotecnología siempre que se haga en ambientes confinados, controlados, sin interacción con el medio. A pesar del gran potencial que tiene la biología molecular para entender la naturaleza y desarrollar la investigación médica, esto no puede ser utilizado como justificación para convertir el medio ambiente en un gigantesco experimento con intereses comerciales.

Cambio Climatico

Hay un amplio consenso científico sobre la estrecha relación entre las concentraciones atmosféricas de los gases de efecto invernadero generadas por la actividad humana y los cambios observados recientemente en el clima terrestre.

Así ha sido identificado por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), grupo auspiciado por las Naciones Unidas que reúne cerca de 3.000 expertos en estas cuestiones.

Estos gases se producen de forma natural y son fundamentales para la vida en la Tierra; impiden que parte del calor solar regrese al espacio, y sin ellos el mundo sería un lugar frío y yermo. Pero cuando el volumen de estos gases es considerable y crece sin parar, provocan unas temperaturas artificialmente elevadas y modifican el clima.

El principal culpable del aumento de gases de efecto invernadero en la atmósfera es el proceso de industrialización iniciado hace siglo y medio y, en particular, la combustión de petróleo, carbón y gas para producir energía, la tala de bosques y algunos métodos de explotación agrícola. Estas actividades han aumentado enormemente el volumen de "gases de efecto invernadero" de forma muy rápida en la atmósfera, sobre todo de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso.

Para evitar un cambio climático peligroso necesitamos reducciones drásticas y rápidas de emisiones de gases de efecto invernadero. El sector que más posibilidades tiene de reducir de forma eficaz sus emisiones es el eléctrico, a través del ahorro, de la eficiencia y de la introducción de las energías renovables en la generación de electricidad.

Desde un punto de vista ético y desde una perspectiva legal y práctica, el peso inicial de la reducción de las emisiones tiene que recaer en los países industrializados, los principales causantes del cambio climático.

29 marzo 2009

La "Hora del Planeta"

Sídney | AFP

Australia. La bahía de Sídney a oscuras.
Australia. La bahía de Sídney a oscuras.

La "hora del Planeta" comenzó oficialmente en Sídney poco después de las 09.30 GMT con un apagón espectacular, al que se sumó la célebre Ópera.

La operación se desarrolló en cada país entre las 20.30 y las 21.30 locales, a iniciativa de la organización ecologista Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).

En 2008, unos 50 millones de personas en más de 35 países se sumaron a la campaña.

"Queremos que la gente se pregunte, aunque sea durante una hora, lo que puede hacer para reducir su emisión de carbono", declaró en Sídney el organizador de la operación, Andy Ridley.

La iniciativa nació en Sídney en 2007, donde más de dos millones de personas apagaron entonces las luces, y se ha extendido a 3.929 ciudades, pueblos y localidades de cerca de 90 países.

El viernes, el gobierno de Costa Rica llamó a sus ciudadanos a unirse a "La hora del Planeta", previendo un ahorro económico importante y "13.000 kilos de dióxido de carbono menos en la atmósfera".

El Salvador también se sumó, según informaron el miércoles sus promotores.

Más de 200 ciudades en Francia y 26 en España participarán también en la iniciativa.

Al menos 371 monumentos del mundo entero, entre ellos el Empire State, el Vaticano, las cataratas del Niágara, la Torre Eiffel, la Acrópolis y el estadio del "Nido del Pájaro" de Pekín apagaron las luces durante una hora.

En Hong Kong, conocido por su luminosa bahía, 1.500 edificios se quedó a oscuras.

En Grecia, unas 200.000 personas y 470 ayuntamientos se sumaron al movimiento, algo nunca visto en un país con poca conciencia ecológica, según la delegación griega del WFF.

En Egipto, el ministro de Medio Ambiente declaraba contar con el apoyo de los 80 millones de habitantes del país para "convencer a las potencias mundiales (...) de reducir las emisiones de sus proyectos industriales".

En Emiratos Árabes Unidos, los primeros consumidores de energía del mundo por habitante, el palacio de siete estrellas Burj al-Arab es uno de los establecimientos que también ser sumó al apagón.

Incluso unos alpinistas tenían previsto izar la bandera de la campaña "La hora del Planeta" en la cumbre del Everest, la más elevada del mundo.

En diciembre, la comunidad internacional se reunirá en Copenhague para intentar renovar el protocolo de Kioto sobre la reducción de emisiones de CO2, que expira en 2012.

Los más escépticos han denunciado una operación fundamentalmente simbólica y un científico danés consideró que el uso de velas durante una hora produciría más emisiones de dióxido de carbono que las luces eléctricas.

25 marzo 2009

Uruguay se apresta a enfrentar cambio climático

Montevideo, 24 mar (PL) Un seminario nacional sobre los desafíos del cambio climático comenzó hoy en esta capital como parte de las acciones del gobierno uruguayo para encarar los efectos de ese fenómeno global.

A la reunión, inaugurada por el vicepresidente del país, Rodolfo Nin, asisten ministros, expertos y autoridades de organismos nacionales e internacionales relacionados con el estudio y enfrentamiento de las condiciones climáticas extremas generadas por el propio hombre.

Nin apuntó que la solución del problema en Uruguay trasciende a los gobiernos y abogó por una política de Estado que, con carácter estratégico y a largo plazo, permita contrarrestar las consecuencias.

Expertos locales corroboraron lo que la simple percepción de la ciudadanía ya daba por cierto: la nación suramericana padece ya los rigores propios del cambio climático global.

Una sequía catalogada como la más severa en 80 años, seguida de intensas precipitaciones y granizadas, tornados inusuales en estas latitudes, temperaturas extremas en invierno y verano, son algunas de las expresiones de esa variabilidad climática.

Solo las pérdidas provocadas por la sequía se calculan en más de 400 millones de dólares.

Un informe del Banco Mundial da cuenta que pese a poseer una de las matrices energéticas más limpias y una economía de baja intensidad de emisiones de carbono, Uruguay no está a salvo de los peligros que para la economía y la sociedad comporta el fenómeno. Según el autor del estudio, John Nash, aquellos episodios “forman parte de una tendencia climática general en América Latina”

En opinión de Nash, el deterioro de los ecosistemas de la cordillera de los Andes, el colapso del medio ecológico en la cuenca del Caribe, y la muerte regresiva de los bosques de la cuenca del Amazonas, son algunas de las previsibles manifestaciones del cambio climático en la región.

El especialista comentó que Uruguay posee “un gran potencial de mitigación en el sector agropecuario, asociado al despliegue de prácticas agropecuarias mejoradas, así como a medidas para mejorar el almacenamiento de carbono en los suelos o en la capa vegetal”.

Hace una semana, el presidente Tabaré Vázquez anunció que el gobierno dispondrá de un fondo de emergencia para encarar los efectos del cambio climático y creará un grupo de trabajo para prevenir y adaptar al país a las inestabilidades atmosféricas.

Al Gore publicará nuevo libro sobre cambio climático


NUEVA YORK (Reuters) - El ganador del premio Nobel de la Paz y ex vicepresidente estadounidense Al Gore publicará una continuación de su éxito de ventas sobre el medio ambiente "An Inconvenient Truth" el 3 de noviembre.

El libro, titulado "Our Choice", describirá soluciones para el calentamiento global, señalaron el martes Gore y la editorial estadounidense Rodale Inc. mediante un comunicado.

"'An Inconvenient Truth' llegó a millones de personas con el mensaje que que la crisis climática está amenazando el futuro de la civilización humana y eso debe y puede ser resuelto" dijo Gore.

"Ahora que la necesidad de acciones urgentes son más claras con los alarmantes descubrimientos en los últimos tres años, es tiempo de un plan mundial que realmente resuelva la crisis climática. 'Our Choice' responde a ese llamado" agregó.

Gore recibió el Nobel de la Paz en el 2007 por su trabajo para elevar la conciencia sobre el cambio climático y el mismo año ganó un premio Oscar por un documental basado en sus presentaciones y el libro "An Inconvenient Truth".

Gore añadió que donará todas las ganancias de "Our Choice" a la organización Alliance for Climate Protection.